E
X P E R
I E N C
I A S 2010
Club de Montaña Peña Torquilla
Aquí
os
ponemos
algunas
de
actividades
que
hemos
realizado.
Si
queréis
saber los itinerarios seguidas
de éstos
y otros
más,
tenéis
que
ir
a
la
página
de
Rutas
y si queréis fotos, pues eso:
Fotografías |
Invernal de Peña Mayor por el Pinar autóctono de Velilla
31.01.2010
Estaba previsto, según el calendario, hacer
las rutas de Pico Ten y La Uña-Ventaniella, pero el mal
tiempo y mal estado de la carretera nos hizo desistir.
Así es que a las 8 de la mañana nos juntamos 15
montañeros y decidimos hacer Peña Mayor por el Pinar
autóctono. Carmelo N, Carmen Ibáñez, Mamen, Ángel
Sancha y su hijo Ángel, con Jose B subimos al Collado
del Pinar por “camino del monte” (lo que los velillenses
llaman “El Cortijo”) a fin de practicar con las
raquetas. La subida por este cortafuegos tan pindio se
hizo más fácil con nieve que sin ella. Llegados arriba
vimos que los demás se habían separado en el Collado del
Pinar en tres grupos. Subirían la diagonal a la
Colladina de las Nieves Aurelio y Chema, a la colladina
de Peñica Blanca Raúl y Rafa.
Por otra parte, Carmelo H, Jose P, Javi,
Mazuelas y Roberto habían decidido subir las Agrias,
ruta directa a la primera cumbre. Era todo un
espectáculo ver cómo se manejaban con los crampones y
piolets, sobre todo en el último tramo que estaba muy
pinado y costó bastante subir. Estos dos grupos se
juntarían en Peña Mayor , la de Guardo, donde hacía poco
habíamos puesto el buzón de cumbres, pero que no
pudieron encontrar por la cantidad de nieve caída.
Después nos juntaríamos todos en el derruido
chozo de Vidal, y tras contarnos las experiencias
oportunas, como la peripecia de Raúl, cayéndose de
bruces en la nieve y romperse los pantalones con los
crampones, unos bajarían a duras penas, por la maleza,
por el Valle del Arroyo Tijera a la carretera de
Valcobero y los otros por la pista que rodeando el monte
lleva al mismo lado.
Llegaríamos a las 14:00 h. al poblado de
Compuerto para comer, mientras no dejaba de nevar y
esperando impacientes la próxima salida,
aunque
Carmen Ibáñez, que era la primera vez que venía con
nosotros decía que “creo que esto no es lo mío”.
|
San Isidro
07.02.2010.
Participaron 8 personas. Guías: Javi R y Jose B.
Esperábamos más éxito en esta actividad,
pero se ve que el mal tiempo echó para atrás al
personal. Sin embargo tuvimos un día ideal para esquiar,
a veces con niebla. Jose P y Carmelo N. decidieron hacer
una ruta invernal, y ni cortos ni perezosos se hicieron
la Sierra de Sentiles y el Pico Toneo. Carmelo era la
primera vez que calzaba unos crampones y alucinó con la
experiencia. Los demás aprovechamos todo lo que pudimos
a esquiar, porque ya se sabe que a lo mejor es la última
vez de esta temporada...
|
Mampodre
y Valle Riosol 07.03.2010
Participaron 20 personas.
Guías: Javi R, Jose P y Jose B.
El tiempo no acompañaba, pero
sin embargo todavía se apuntaron 26 personas, aunque
sólo se presentaron al autobús 20. Salimos a las 8:00 y
llegamos a Maraña a las 9:20, donde dejamos a los siete
entusiastas que iban a subir a Mampodre con alguna duda
ya que estaba lloviznando. Los otros trece continuamos
hasta el puerto de Tarna para comenzar una sencilla
travesía por el Valle Riosol-Maraña-Acebedo.
Al principio también nos llovía y nos
metíamos hasta la cintura en la nieve. Pero al llegar a
la Ermita de Riosol la nieve desapareció del suelo y
también del cielo y pudimos hacer un paseo muy
tranquilo. Venían con nosotros por primera vez Pedro
Herrero, con sus padres, su mujer Mª Teresa y sus hijas
Candela y Marina, de cuatro y seis años respectivamente.
Así que todo quedaba en familia. Descansamos en Maraña y
llegamos a Acebedo a las dos de la tarde, donde
aprovechamos para ver su torre exenta y comer mientras
esperábamos a los compañeros hasta las tres y media. Las
niñas disfrutaron jugando con la nieve, con sus abuelos,
y también con un perro que se nos unió en Maraña, con lo
que no acabaron cansadas. El abuelo, de 63 años, con
experiencia de andarín, había dejado esta práctica desde
que nacieron las nietas. Y la abuela, que hace mucho
deporte, no tuvo ningún problema en andar, así que ambos
piensan venir desde Palencia a todas las marchas que
puedan.
Pedro, junto con su familia, se
ha hecho socios del club este año ya que tienen una casa
en Guardo y vienen casi todos los fines de semana. Se le
ha notado que tiene experiencia senderista, pero ahora
ha estado un poco desentrenado, aunque al ir siendo
mayores las hijas ya piensa retomar el ritmo montañero.
Raúl, se arrepintió de no haber
subido a la Polinosa en vez del Riosol
Adolfo también vino por primera
vez, a probar, pero la próxima vez dice que va a ir con
los "roqueros", como hemos bautizado hoy a los cañeros
del Mampodre.
Asun, habitual en estas rutas,
trajo a su hija Eva y se han animado a venir más veces
juntas.
Los del Mampodre subieron por
la arista a la Polinosa a duras penas, a ciegas como
diría alguno, por la niebla que había tanto al subir y
al bajar. Se dejó una tarjeta de cumbres en recuerdo de
Juanma y Alberto fallecidos el martes de esta semana
escalando en el Espigüete.
CarmeloH. había pasado mucho
hambre porque no habían parado a comer nada y por eso le
había costado mucho subir.
A Javi y Pastelero, guías, el
personal, que ya a la ½ hora quería volver a Maraña, le
estuvo protestando todo el tiempo, ya que no sabía nadie
donde estaba por esa niebla. Y hasta Chema con humor se
quejó de su hermano Javi, porque éste decía eso típico
de "que ya llegamos".
Para David M, Carmelo H. sigue
estando en su línea "Es como que llevas la radio puesta,
siempre hablando de política, de arreglar el pueblo,
..."
A Gonzalo lo único que mereció
la pena y mucho, fue la cumbre, porque salió el sol. |
Sierra
la Cebollera - Senda del Escultor 18.04.2010
Participaron 20 personas. Guías: Javi R, Jose P y Jose B.
Como cada vez que es posible, habíamos
propuesto dos rutas, una fácil y otra menos: la de la
Sierra la Cebollera (Golobar-Coto de Comunales-Valle
Santullán-Senda del Escultor) y la Senda del Escultor,
propia mente dicha. Al principio, como suele ocurrir,
casi todos los inscritos iban a ir a la marcha fácil.
Sin embargo, al final, se dan cuenta que pueden hacer la
otra y se animan a la “dura”. Así es que saliendo de
Guardo a las 9:10, en una hora estábamos en Brañosera y
10 minutos más tarde nos quedamos a 1 km. del Golobar,
al que no pudo llegar el autobús porque la carretera
estaba cerrada por un gran parvero de nieve, y como
pudo, el conductor Paco dio la vuelta para bajar. Como
él diría: “Si lo cuento, no me lo creen”. El autobús
había venido en menos tiempo de los previsto, pero no
había problemas de mareo, porque aquí también aprendimos
que hay gente que se pone una aspirina con esparadrapo
en el ombligo para no marearse y al parecer les
funciona.
Total, que 13 aventureros se dispusieron a
llegar al Golobar y comenzar su paseo y otros seis
montamos de nuevo al autobús, para según lo previsto
llegar a la ermita del Carmen y empezar la Senda de Ursi
a las 11:15. Ésta nos la tomamos con calma, tardando
cinco horas en hacer los 12 km. porque llevábamos dos
niñas (Candela y Marina, de 4 y 6 años, respectivamente)
y a Quico, de 10 años, que iban jugando siempre y
paraban a ver todas las esculturas y a hacerse una foto
con ellas, aunque terminaron con los pantalones llenos
de barro por el barrizal formado por este año tan
lluvioso. Además, también parábamos a comer galletas y
dulces, porque es que esta Candela siempre tiene
apetito... Pero no había prisa, el tiempo era ideal, al
parecer el único sitio donde no llovía, y teníamos que
esperar al otro grupo. Así es que disfrutábamos del
verde especial de esta época del año y de la compañía.
El papá de Quico, Adolfo Arranz,
infografista, no perdió detalle, de tal manera que al
día siguiente ya pudimos disfrutar de su arte en su
blog.
Maite se lo pasó en grande viendo disfrutar
a sus dos niñas, aunque se quejaba un poco de la
mochila, a la que dice que tiene que acostumbrarse, ya
que su marido Pedro en esta ocasión había ido con los
otros ruteros.
Los de la marcha de la Sierra la Cebollera,
tuvieron muchos cambio de clima (niebla, granizo,
lluvia, calor, de todo...), pero disfrutaron del buen
ambiente y buen rollo, y como dijo Alberto, sólo habían
callado para comer, riéndose mucho con Carmelo H.
Juan, que es la primera vez que viene con
nosotros, se hinchó a hacer fotos a pesar de la niebla.
Begoña, su hermana dice: “Yo pondría un destaca a las
clases del Conocimiento del Medio de Javi, el guía,
sobre las guerras, trincheras, zulos, ruedas de molino,
turismo rural activo... de lo que nos iba poniendo
continuamente al día”
Rafa, con sus pequeños esquís, aprovechó las
últimas nieves del año, yendo por libre donde pudo para
conseguirlo
Al final, enlazaron con la Senda del
Escultor, y les llamó la atención algunos pasos
estrechos que han puesto en la senda para que el ganado
no lo atraviese, imposible de pasar con mochila, y
habiéndolo de hacer de perfil. Así, que a los robustos
dos Carmelos eso le parecía un circo, porque cada vez se
lo ponían más difícil.
Total que hicieron los 21 km. en seis horas,
y después de tomar unos refrigerios en el bar de la
Ermita del Carmen llegamos a Guardo a las 18:50h.
|
El
Canal de Castilla, ramal norte, en bicicleta
01.05.2010.
Participaron 9 personas (8 socios). Guías: Javi R, Jose
María Monge y Jose B.
Era una de esas rutas que preparas con
ilusión pensando que le va a interesar a mucha gente.
Sin embargo no fue así, bien sea porque es mala fecha,
porque las previsiones del tiempo no eran muy alagüeñas,
porque los 80 km. asustaron, o porque el precio
pareciera caro.
Pero así y todo todavía nos presentamos 9
entusiastas. Fuimos con los coches de Chema y el de
Jose B, que conducía Javi con un carro grande para
transportar las bicis. Al llegar a Alar hacía mucho aire
y frío, así es que todo lo rápido que pudimos nos
dispusimos a salir a las 9:20 h.
Bueno, pues nada más comenzar a andar, en
una corta bajada, Chema tuvo que frenar porque se
chocaba con Carmelo Hompa y dio una espectacular vuelta
de campana. Todo parecía comenzar mal, pero al final,
fue un pequeño susto y una pequeña herida en la
rodilla....
Javi nos seguía con el coche y el carro a
todos los cruces. Era una pesadilla.... En estos casos
siempre tiene que haber algún voluntarioso que no haga
la ruta para estar de apoyo. Pero no se aburrió: cada
vez que llegábamos a un puente allí estaba grabándonos
en el vídeo.
Llegamos a Herrera y a sabiendas de que la
ruta continuaba hasta el pueblo, decidimos seguir el
canal a ver si habían ampliado la pista. Pero nada,
tuvimos que dar la vuelta para llegar al Centro de
Interpretación del Canal y ver el barco que se disponía
a empezar su viaje turístico. Continuamos la ruta que a
veces se hacía interminable por las largas rectas y las
ruedas que se pegaban en la húmeda pista, además del
dolor de trasero de los que a estas alturas de la
temporada todavía no hemos empezado a andar en
bicicleta. Llegamos a Requena de Campos a las 14:00 h.
donde comimos. Buscábamos una cafetería para tomar un
refrigerio, pero preguntando a uno del pueblo nos dijo
con humor que allí no había bar: “Estamos dejando el
vicio”.
A las 15:45 reanudamos la actividad hacia
Frómista. Raúl pinchó poco antes de llegar. Nos encantó
la cuádruple esclusa de esta localidad. Unos decidieron
ir a tomar un café. Carmelo Hompa siguió para adelante
solo y Pedro decidió apearse de la bici, para
resguardarse de una antigua lesión y poder realizar al
día siguiente un paseo a la montaña.
A las 16:50 llegamos a Calahorra de Campos,
donde nos esperaba Carmelo, y poco después todos los
demás, con media hora de adelanto del horario máximo
previsto sobre los 80 km. de nuestra aventura. Como era
pronto bajamos a ver el cruce del Canal y el Carrión al
mismo nivel, depositando al Carrión las aguas del
Pisuerga que lleva el Canal y cogiendo el Canal ahora
las aguas del Carrión.
Comenzaba el regreso y con las bicis ya en
el carro, unos regresaron por Alar para que Chema
cogiera su coche y viniera a buscarnos a los demás a
Ribas de Campos, donde fuimos Carmelo N, Alberto, Jose P
y Jose B dando un paseo. Tuvimos que esperar hora y
media, pero entre las cervezas, y las partidas de
futbolín se nos pasó el tiempo enseguida. Alberto,
jovencito que se las daba de campeón, creía que nos iba
a dar una lección de futbolín, pero no sabía que somos
viejos rockeros de este arte, sorprendiéndole de nuestra
audacia y pegándole un palo de campeonato.
Llegamos a Guardo a las 20:30, y por primera
vez en mucho tiempo no teníamos prisa porque al día
siguiente era domingo y no como las demás veces que
viene el lunes, y hay que dejarlo todo preparado para el
curre del día siguiente. Normalmente nuestras rutas las
ponemos los domingos, porque los sábados es el único día
que algunos tienen para hacer las compras o el
correspondiente zafarrancho de la casa. Pero en esta
ocasión hoy sábado ha sido fiesta y mañana, el día de la
madre. Y claro, ya se sabe: “madre no hay más que
una...” |
Pico San Millán (Burgos)
16.05.10
Participaron 16 personas (12 socios). Guías: Vicky
Alonso, Óscar Mediavilla y César Burgos.
Salimos a las 7:30 de la mañana con los
coches de Rafael F y Jose B, para unirnos en Saldaña al
de Óscar. Habíamos dejado en Guardo un día soleado, pero
llegando a Burgos, todo se convirtió en un oscuro manto
de nubes. Comenzamos la ruta en el Área Recreativa de
Zarcia a las 10:50. Éramos 16 montañeros más Homer, el
perro de Vicky y Óscar. Con amenazante lluvia iniciamos
un bonito paseo que pronto se transformó en una aventura
de vadear arroyos, cada uno como podía, hasta llegar a
las faldas del pico, donde comenzamos a pisar la nieve
que no nos dejaría ya hasta la cumbre. En estos momentos
Luis y Nati abandonaron la ruta, explicándonos a los
últimos el camino a seguir. Seguimos las huellas
marcadas, tras César, que con traje de corredor subía
en zapatillas. La niebla era intensa y pocas veces
teníamos buenas vistas de los ascendido o de lo
pendiente por subir. A la 1 del mediodía también nos
dejó Pedro, que tenía calambres y bajó acompañado por
Vicky, como buena y responsable guía.
Llegamos a la cumbre a las 14:20 horas.
César llegó el primero acompañado de Carmelo Hompa, al
que apodó el “jabalí”. Cuando llegó el último, César
bajó corriendo por donde habíamos venido. De repente,
con esa suerte que se merece tener después del esfuerzo,
se fue la niebla y tuvimos unas estupendas vistas. Pero
como hacía frío, tras la pertinente foto, continuamos
hacia Pineda de la Sierra en busca de un sitio donde
comer el bocadillo. Rafael F. como siempre, bajó
esquiando lo que pudo hasta que se acabó la nieve, justo
cuando encontramos un roquedo y sitio ideal para
almorzar, ya con día primaveral, frente a Pineda y más
allá el Pico Mencilla, que cierra por el sur la Sierra
de la Demanda.
A las 15:40 reanudamos la larga pero cómoda
bajada de casi dos horas hasta Pineda de la Sierra,
donde descansamos en una terraza de cafetería y nos
organizamos para ir a por los coches que habíamos dejado
en el Área Recreativa de donde partimos, a unos 25 km.
Tras el largo viaje, llegamos a Guardo a las 21:20.
Agradecidos estamos además al albañil
Rafael Fernández y a la Óptica Alto
Carrión, que subvencionaron el viaje, donando al Club lo
que les correspondería por el desplazamiento en sus
coches.
|
Valdetriollo y el cordal del Tejo 30.05.10
Guías: Javi R y Jose B
Esta es una de esas rutas que he preparado con emotiva
ilusión. Ilusión porque son sitios no transitados por
los montañeros, rutas no escritas ni publicadas en
ningún medio y que procuro diseñar como aptas para todo
el mundo. Emoción porque me recuerda a quien vino
conmigo a conocer este valle cuando la noche se nos echó
encima y luego tuve que volver envuelto en este recuerdo
varias veces hasta acabar de construirla.
Partimos 16 entusiastas de Triollo a las
10:10 de la mañana con un espontáneo mastín que nos
acompañó durante toda la jornada. Una vez llegado al
refugio, las niñas Candelas y Marina se quedaron con
madre Teresa y sus abuelos Pedro y Felicitas para pasar
el día por el valle hasta el regreso de los demás. A las
12: 50 ya estábamos en las cumbres del Tejo, donde nos
hicimos las oportunas fotos en medio de unas
espectaculares vistas. Una hora después llegamos al Coto
de las Guerras para bajar un poco, evitando el aire, y
comer de frente a una preciosa vista del Curavacas que
animaba a los expertos a dar las explicaciones de todas
las canales y ascensiones posibles. Podíamos contemplar
en estado salvaje además, a manadas de venados y
caballos.
A las 14:30 continuamos hacia Peña María y
Peña de la Dehesa para estar en Triollo a las 16:50.
Gonzalo, que está como un toro, aprovechó
para subir alguna atalaya de más y entrenarse, aunque a
veces tiraba delante del grupo y confundía algo al
personal.
Para Carmelo Hompa ha sido una de las rutas
más bonitas que ha hecho y coincidió con el resto en las
extraordinarias vistas, el tener a un lado las montañas
y al otro lado los pantanos además de la fauna que nos
acompañó en un día primaveral.
Tanto para Pedro, Carmelo Hompa, Carmelo N y
Raúl como hasta el mismo Jose P, otro de los cañeros,
les pareció algo fuerte por la sierra del perfil,
bajadas y subidas constantes.
Para Salvador, aunque le gustó, fue un poco
dura para ser la primera de la temporada.
A Juan además le llamó mucho la atención que
se había enterado de muchos topónimos de picos y
lugares. Aunque sabía que les olvidaría pronto, cuando
los volviera a oír, a buen seguro que ya le resultarían
familiares.
Asun se asombró ella misma de que había
aguantado bien. |
Espigüete y
Ruta de las Cascadas (de Valverde a Pino Llano)
27.06.10 Guías: Jose P, Javi R, Chema y Jose B
Se habían apuntado 48 personas, pero como
había llovido mucho los días anteriores y se esperaba
que continuara así el tiempo, al final sólo fuimos 38.
Sin embargo sigue siendo un éxito en cuanto a
participación y casi un record si exceptuamos las
primeras salidas allá en el 2000. La mayoría se había
apuntado al Espigüete. Aunque para la ruta de las
Cascadas también había interés, como suele ocurrir,
cuando empezamos la salida, los que se habían apuntado a
la ruta más fácil, cambian y se animan a hacer la más
difícil, con el acierto asegurado. Salimos a las 9:50 de
Valverde de la Sierra: Siete para las Cascadas y 31 para
el Espigüete, con un día de verano nublado, ideal para
andar.
Los de las Cascadas llegamos al Alto de los
Cutulillos a las 12:00, consiguiendo su primer dosmil
Candela y Marina, de cuatro y seis años respectivamente,
junto con su madre. Pudimos disfrutar de buenas vistas
pues se había ido la niebla y ver por la cresta a
nuestros compañeros. Después, bajaríamos entre las
escobas a buscar las cascadas de Mazobres y a comer al
refugio, donde según lo previsto, nos juntaríamos con
los demás. Cuando llegamos, a las 14:30 ya estaban allí
los avanzadillos de Gonzalo, Chatín, etc.
En cuanto a los del Espigüete, decir que
alguno se asustó al principio, pues se salió demasiado
deprisa. Luego se bajó el ritmo y en el paso por la
brecha de la roca todos colaboraron. A las 12:00
hicieron cima de la que disfrutaron casi una hora.
A Laura y Ceci, dos jovencitas que se están
iniciando en esto de la montaña, les pareció la ruta
“una pasada” a pesar de lo que les costó la bajada.
A Paco y Aquilino, dos nuevos socios y la
primera vez que viene con nosotros, les ha entusiasmado
y ya están pensando en el Curavacas del 5 de septiembre.
Así es que había mucha gente nueva, como
José María Loma, que también piensa repetir, aunque dice
que llevamos un ritmo muy fuerte.
Juan, ya asiduo, dijo que si le llegan a
decir que a las 14:30 iba a estar en el refugio, hubiera
desistido de subir pues pensaría que era imposible. Así
es que terminó asombrado.
Mamen, una de las que al final optaron por
hacer la ruta dura, dijo que era una asignatura
pendiente para ella y estaba que rebosaba de orgullo al
haber conseguido crestear todo el Espigüete, “una
experiencia preciosa”.
Eladio, de 64 años nos comentó que siempre
había tenido ilusión de hacer esta ascensión, pero que
cuando estaba arriba, de lo que más ganas tenía era de
acabar la bajada.
Para Iñaqui, que tantas veces me había
comentado las ganas que le tenía a este pico y que iba
asustado pensando en la posible “tormenta” le había
merecido la pena la espera, no dando crédito cuando ya
estaba arriba. Pide que para la próxima vez se pongan
avituallamientos.
Los últimos llegaron a las 15:00 h. Y
después de comer bajaron ya todos hasta Pino Llano,
donde comenzó la tormenta. Así es que más suerte:
imposible. Y como ésta venía amenazando con bastante
tiempo Jose B ya había bajado antes hasta el Puente
Agudín, a coger cobertura y llamar al autobús para que
nos recogiera cuanto antes, pues si no tendríamos que
esperar dos horas más según lo acordado. Total. Que a
las cinco de la tarde ya estábamos en Guardo. |
Abadía de
Lebanza-Polentinos-Valsadornín-Cervera
04-07-10
Guías: Javi R y Jose B
El chófer del
autobús no se había enterado de que tenía viaje, así es que salimos 40
minutos más tarde de lo previsto, a las 9:40. Una hora después partimos
los 14 excursionistas de la Abadía de Lebanza, a 28 grados
(alcanzaríamos los 33). Tras una cómoda subida llegamos a Polentinos a
las 11:35, donde nos detuvimos un buen rato para visitar el pueblo.
Continuamos hacia la presa del pantano de Requejada, prácticamente todo
bajada, pero con mucho calor, para a las dos de la tarde llegar por
carretera donde una señal nos indicaba la ruta de la Senda del Oso.
Aquí las niñas Candela y Marina, de 4 y 6 años, respectivamente, con su
madre y sus abuelos, seguirían a Arbejal, y de ahí por la senda a
Cervera. Harían al final, un recorrido más que considerable de 16 km.
(Como sigan así, cualquier día se presentan en el Espigüete).
Continuamos la senda del Oso hacia el pantano para subir
hacia el Collado de Peñas Negras los otros nueve (Más bien once, porque
un perro cojo se nos arrimó desde Polentinos y no nos dejaría hasta
Cervera, habiéndose echado otro compañero en Valsadornín, que también
nos acompañó). Al llegar a un mirador, decidimos atacar directamente la
Peña del Oso, a cañón, donde llegamos a las 15:15 h. con un asfixiante
calor. Estábamos en el corazón de la Montaña Palentina, así es que
comimos aquí admirando las espléndidas vistas.
Lo que más preocupaba era la bajada, pues es difícil
encontrar la senda que nos lleva a la pista abandonada y ésta a la
carretera. Pero no hubo mayor problema, salvo el calor que llevábamos y
la humedad. Las piernas pesaban cada vez más, pero conseguimos llegar a
las 5 de la tarde a Rabanal de los Caballeros, donde entramos al bar a
tomarnos unos refrigerios.
Había sido un día de muchas y amenas conversaciones, aunque
la mayoría habían derivado en el Mundial de Fútbol que se estaba
jugando, ya que España ayer se acababa de clasificar para las
semifinales contra Alemania al haber ganado a Paraguay en un partido de
locos. Y aquí, por la tele en Rabanal, veíamos cómo Rafa Nadal estaba
ganando su segundo Wimbledon frente a Tomas Berdych.
No había más remedio, ya quedaba menos y había que seguir
por cómodo paseo, ya con alguna sombra hasta Valsadornín y de ahí a
Cervera donde llegamos a las 18:40, media hora más tarde de lo previsto
a pesar de haber acortado un par de km. en algún tramo.
Todos coincidieron en que la ruta fue muy bonita, pero dura,
no tanto por la distancia sino por el calor. Así, Eduardo comentaba que
tenía los talones tan recalentados que parecía que había hecho el Camino
de Santiago. Y sí agradeció que por primera vez en nuestras rutas,
cuando había dos caminos siempre cogimos el que iba para abajo |
El Tesorero y
Las Torres Altaiz - San Carlos - Hoyo
Oscuro - Madejuno 25-07-10
Guías: Javi R, Jose Pe y Jose B
Salimos 23 montañeros a las 7:15 de Guardo y
a las 9:30 llegábamos a Fuente Dé. Hacíamos dos rutas
alternativas, la del Pico Tesorero y para los más
cañeros una travesía por la Torre Altaiz - P. San Carlos
- T. Hoyo Oscuro y el Madejuno. Nueve decidieron subir
por la canal de la Jenduda, y los demás subimos por el
teleférico para empezar a andar a las 10:10. Llegando a
la Vueltona, seis nos dejaron y subieron a la izquierda,
hasta la Fuente Escondida, donde se iban a encontrar con
los que habían subido la canal, para continuar su ruta.
Los otros ocho continuamos a Cabaña Verónica para llegar
al Tesorero a las 14:00, donde estuvimos comiendo casi
una hora, con un día fabuloso, soleado y sin viento,
charlando con los que allí iban subiendo, descifrando el
sinfín de cumbres en nuestra panorámica, donde en la
mayoría podíamos ver a gente. La bajada fue cómoda, y a
las 17:30 estábamos en la estación superior del Cable.
Para los expedicionarios del Tesorero,
guiados por Jose B -Visi, Pepe, Pedro, Concha, Pánzer,
Carlos y Laso-:
- Visi: “Todo muy bien. No me lo esperaba así y la
compañía muy agradable.”
- Laso, bromeando: “Ha sido muy dura y me ha costado
mucho llegar, que para los 55 años que tengo ha sido
todo un triunfo para mí. Se lo he dedicado a mi padre, a
mi madre, a mi abuela y a mi sobrina la pequeña.”
- A Páncer le gustó porque no era la ruta normal de
subida al Tesorero: “Bardasco ha abierto una nueva vía
de subida que la vamos a llamar ‘La Vía Bardasco’.”
- Concha lo pasó un poco mal en la chimenea antes de la
cumbre, pero se portó como una campeona. La catalogación
de ruta fácil que habíamos hecho le pareció demasiado.
“Un pico muy picudo éste. He trepado, escalado...
gritado..., emociones intensas... y lo mejor la
compañía...”
- Pedro Saura: “Un poco exigente el tramo final, pero
con buenas vistas.”
- Pepe subió todo lo que pudo a cañón “el centro de los
Picos de Europa”.
- Carlos estuvo a punto de tirar la toalla en la subida
por el calor. “Pero mereció la pena y por respeto al
grupo.”.
En cuanto a los del Madejuno:
A todos les pareció una dura travesía,
especialmente a Carmelo y a Rodrigo (éste había estado
un poco de juega la noche anterior). Sin embargo, a Mari
Ángeles, que es la primera vez que viene con nosotros, y
ante el asombro de los demás, le había parecido fácil.
Casi se la comen.
También destacaron, como Eva, la mina
vertiente del hoyo sin tierra, que atravesaron, y el
rápel, como a Rafa, que hacía más de 20 años que no lo
practicaba.
Otros manifestaron más entusiasmo, como
Chatín: “Hay que repetirla que es muy bonita”. Bajó la
Jenduda, prácticamente corriendo.
Y para Quique: “Como siempre, con Peña
Torquilla siempre bien, y yendo con Pastelero y con Javi,
que son los mejores, unos
monstruos, siempre hay alguna sorpresa espectacular.”
Habíamos estado en continuo contacto por los
walkies las dos excursiones y prácticamente llegamos a
la vez todos abajo a Fuente Dé. Así es que luego paramos
un rato en Potes, a refrigerarnos. |
Virgen del
Mar - Playa Sardinero (Santander) - 08.08.10.
Guías: Jose Mª Monge, Paco Ares y José Antonio Bardasco.
Partimos
36 ruteros a las 8 de Guardo para comenzar nuestra ruta
a las 10:15 de la Virgen del Mar. Como en esta ocasión
había niñas de 3 a 7 años, nueve de nosotros salimos de
Corbanera, 4 km. más allá para que no se les hiciera muy
pesado el recorrido a las peques, aunque Marina y
Candela que ya han venido seis veces este año con
nosotros, hicieron el recorrido grande. Nos juntaríamos
todos en el Panteón del Inglés a la una del mediodía
para ir juntos al Puente del Diablo, al Faro y a la
playa de Mataleñas, donde comimos. Como en esta playa se
estaba fenomenal, decidimos quedarnos allí para el baño
en vez de ir al Sardinero.
El día fue fenómeno para andar, pues estaba
nublado. Y la temperatura, buenísima para un baño. Fue
una excursión muy animada y tranquila, aunque al final
tuvimos que apresurarnos un poco porque el autobús no
podía quedarse en el aparcamiento del Sardinero y nos
tenía que coger casi en marcha. Pero al final todo salió
fenómeno, haciendo una “parada técnica” en Reinosa.
En otras ocasiones, comentamos en el bus lo
surgido en este día y lo plasmamos aquí, pero esta vez
se le ocurrió a Carmelo poner una película de dibujos
animados, así es que no pudo ser.
Aunque a veces Óscar y Vicky tuvieron que
usar las mochila-sillas para llevar a las peques, lo
mejor es lo que han disfrutado las niñas,
jovencitas y jovencitos
que nos acompañaron, a ver si se animan y van cogiendo
afición.
|
Curavacas (05.09.10)
Guías: Jose Mª Monge, Javi R, Chema R y Jose B /
Participamos 39 personas
Salimos a las 9:30 de Vidrieros 39
entusiastas hacia el Curavacas. 18 partieron de la
pradera de Cabriles hacia el Portillo para rapelar el
collado y coger la senda del Notario. Los otros 21
continuamos hacia el Cdo. del Hospital para subir luego
por el Callejo Grande.
El día amenazaba de mucho calor. Sin embargo
poco a poco se fue nublando y quedó un día perfecto para
la ascensión. A la bajada ya volvería de nuevo el sol.
Las dos rutas han encantado al personal,
aunque casi todos coinciden en que es larga, sobre todo
por la pista de Valdenievas que se hace interminable.
Por eso Carmelo N, Alberto y Aurelio bajaron a su aire
por donde mejor les vino, lo que no quitó que se
llevaran alguna sorpresa.
Para los rapeleros esto fue precisamente lo
que más les gustó. “Mola esto del rápel” diría el Peina.
Por su parte José Luis y Víctor Manuel, que era la
primera vez que salían con nosotros dijeron que “Hay que
repetir. Una pasada lo del rápel”.
Esta vez, las machacas del club, Eva y
Mariena no querían que les hiciera sombra Mari Ángeles,
que había empezado a salir con el club y tenía muy
buenas maneras. Así que vinieron a demostrar su poderío.
Sin embargo se sombraron de la dureza de esta chica y
ahora ya saben que tienen otra cañera de compañera. Y
como siempre, asombrándonos, Mariena decía “Es la vez
que menos me ha costado subir”, cosa que a alguno de los
que más sufrimos nos sienta como ....
A los que fuimos a hacer la ruta normal
luego se nos quedó en más fuerte de lo que se esperaba
porque bajamos por la loma de la Curruquilla. María y
Vicente, que iban un poco más despacio no llegaron a
cumbrear, pero se lo pasaron genial. Tuvimos un día de
mucho alegría por el humor, sobre todo puesto por los de
la Peña (Loma y compañía) e Iñaqui y sus amigos dando
mucha guerra a los guías Chema y Jose B. Este buen royo
siempre es motivo de celebración y agradecimiento.
Llegamos a las 13:!5 a la cima, y estuvimos
comiendo casi una hora. El de Gozón no cabía de “gozo”
la que al llegar al Curavacas había podido estrechar la
mano de Tente Lagunilla que por allí se había dejado
caer.
Como los rapeleros del Portillo no acababan
de llegar todos, pues todavía desde la cumbre les
estábamos viendo maniobrar, decidimos continuar el
trayecto.
Nadie puso pega a sortear las cumbres que
nos faltaban para llegar a Valdenievas, así es que nos
dirigimos hacia allá con unos tramos bastante técnicos
donde alguno expulsó toda la adrenalina.
Al final nos juntamos los dos grupos en la
tenada de la pradera de Valdenievas para llegar a
Vidrieros después de casi 10 horas de nuestra salida.
Así es que alguno diría que eso de clasificar las rutas
de fácil-media-alta, no queda muy claro. Y Carcaboso
decía que le había parecido todo impresionante, pero
“eso de ruta frágil no es cierto, es de mucha montaña”
(confundiendo ‘fácil’ con ‘frágil’, que a lo mejor es
un nuevo concepto que tenemos que meter en nuestro
vocabulario.). Bueno, podríamos establecer el sistema
M.I.D.E.,
pero no sé si todo el mundo se llegaría a acostumbrar. |
Marcha nocturna a Peña Mayor
(25.09.10) Guías: Raúl Macho, Javi R y Jose B
Horarios: Salida a las 20:10; campera
Cantecín a las 20:50; Cdo. Pedro Fernández a las 21:20;
Cueto del Asno a las 22:10; Cdo Peña Mayor a las
22:55; Peña Mayor a las 23:05; llegada al Equus a las
1:50 h.
Participamos 13 montañeros y aunque había
estado todo el día nublado, al final se despejó y cuando
salió la luna, a las 21:40, ésta era como una farola que
nos alumbraba continuamente, aunque si andábamos frente
a ella nos molestaba y echábamos de menos una gorra.
Como tradición, esta salida nocturna la
hacemos a un lugar por sorpresa, pero esta vez no fue
tanto pues repetimos la del año anterior. En 30' ya
estábamos en la campera de Cantecín, ya totalmente de
noche, y allí cogimos a Miguel Ángel, que venía por la
pista del Bº Barruelo. Después, guiados siempre por
Raúl, que afirma haber subido a Peña Mayor unas mil
veces, atajábamos por donde quería, aunque no
conseguimos batir el record del año pasado, estando
continuamente por detrás de sus tiempos parciales en
unos diez minutos.
La subida fue bastante cómoda, y cuando nos
quisimos dar cuenta ya estábamos en la cumbre, aunque
habíamos parado mucho a ver el paisaje que se nos
ofrecía detrás de nosotros: luces dispersas de infinidad
de pueblos que jugábamos a adivinar en el mar de
Palencia y algunos de León (“Son como barquitos” que
decía Charo.). Allá al fondo el resplandor de la
capital. Y más cerca, el parque eólico de la Vega-Valdavia
donde los aereogeneradores parecían “antidisturbios” en
la profunda noche por el destellar de sus luces
eclipsadas intermitentemente por el paso de sus palas.
José Luis y Charo era la primera vez que
venían con nosotros y para él, acostumbrado a la montaña
de invierno fue un cómodo paseo. Sin embargo a Charo los
16 km. le hicieron sufrir mucho, pero para ella fue todo
una superaventura, porque además de la primera ver que
ascendía a una montaña se le sumaba el agravante de
hacerlo de noche. Pero ha quedado satisfecha de sí misma
y con ganas de hacerse una asidua torquillera.
En la cima nos decidimos a encender unas
antorchas que teníamos de la Cabalgata de Reyes de 2001,
a ver si las podía ver Jose Paste en la lejanía. Pero
había tanto aire que era imposible mantener la llama
vertical, así es que después del pequeño conjuro de las
fotos las apagamos, aunque Paste si logró ver algún
destello desde Valcabadillo.
El cuidadoso descenso nos llevó a comer el
bocadillo en la valleja de Peña Blanca. Después una
larga caminata pos pista, animada por las alusiones
propias de este momento político-económico que vive el
país, paramos en la plateresca fachada de la Casa
Grande a hacernos la foto de grupo. Y a la 1:50
entrábamos en el Equus para tomarnos unas entrañables
cañas. |
Colocación del Buzón
en el Pico Murcia (12.10.10)
El
buzón es obra de Chatín y en
la leyenda figura C.M PEÑA TORQUILLA GUARDO por un lado
y A.D CORRECAMINOS GUARDO por el otro, además de poner
"Pico Murcia 2351 mts. año - 2010". Así el día que suba
la marcha organizada por el club, ya está puesto allí.
-David- |
Lago Ubales - Desfiladero de los Arrudos
(17.10.10)
Guías:
Jose Mª Monge, Javi Rodríguez
/
Participaron 21 personas (15 socios).
Como viene sucediendo últimamente, el
autobús se completó para realizar esta preciosa ruta.
Comenzamos a caminar en la Urbanización de
San Isidro sobre las 9:30 de la mañana, con un tiempo
desapacible y frío, acompañado de una pertinaz llovizna
que a medida que íbamos subiendo se convirtió en los
primeros copos de nieve de este otoño.
Debido a la niebla que reinaba en la cumbres
desechamos la idea de subir al Pico Cascayón.
Al pasar el collado del Acebal y penetrar en
el Parque Natural de Redes el tiempo mejoró
sensiblemente, llegando incluso a verse algunos claros
que nos hizo crear falsas ilusiones, ya que más adelante
se volvió a cerrar y el orballo asturiano no nos
abandonó prácticamente hasta Caleao.
No obstante la ruta resultó bonita de
verdad, con un lago Ubales precioso, unas vistas
espectaculares de todos los valles del parque,
resaltados en esta época por el cromatismo de colores
del bosque otoñal.
Preciosas igualmente las majadas de Mayones,
Llende y Rexecu. Lástima que los chozos de piedras
labradas, la mayoría, y que han servido al pastoreo
durante tantos años, se encuentren actualmente en un
estado ruinoso, debido al abandono de la ganadería. Los
poderes políticos asturianos deberían tomar alguna
decisión al respecto para su restauración y
conservación.
Comimos el bocata a medio desfiladero de los
Arrudos, precioso y rebosante de agua por todas partes
(Se nota que estamos en Astuiras), aunque algunos
prefirieron seguir hasta Caleao, con la esperanza de
poder comer en el bar, cosa que no sucedió ya que estaba
todo reservado y por lo que se dedicaron a darle al
cubata y al pacharán, lo que les hizo estar bastante
locuaces en el viaje de vuelta.
-Raúl-
|
Barniedo-Valle Valponguero-Pico Murcia
(07.11.10) Guías: Raúl M y Alberto Rodríguez /
Participaron 12 personas (9 socios)
Parecía que iba a hacer buen tiempo, porque cuando
llegamos a Barniedo había claros. Pero nada... al poco
empezó a nevar y cuanto más subíamos peor y peor.
Pudimos llegar, con niebla, al collado, donde estuvimos
dudando si subir al Pico Murcia o no, ya que hacía
malísimo y además se había levantado ventisca. Al final,
de los 12 que íbamos, nueve decidimos llegar a la
cumbre, con un viento huracanado... El
buzón del club, en el Pico Murcia (obra de
Agustín Antón -Chatín-, colocado el 12 de octubre de
2010 por él mismo junto con David Macho, Chema Montes y
Aurelio González-), estaba congelado y no se podía
abrir.
En la bajada, con la niebla que había, que
si por aquí..., que si por allá..., no dimos con el
collado y Carmelo Hompa nos metió a derecho por un
pedregal espantoso seguido de empapados escobales...
Conseguimos llegar al refugio y como ya
tenían la lumbre hecha, nos pudimos secar un poco y a
comer el bocata. |
Convivencia en Sopelana (20 y 21.11.10)
Participaron 16 personas (14 socios). Responsables:
Vicky y Óscar
Partimos de Guardo a las 7:00 de la mañana con dos
coches. La familia de Pedro salió de Villamuriel una
hora más tarde y el viernes ya habían marchado Vicky,
Óscar y las niñas. Ya todos juntos en Gorliz emprendimos
la ruta a las 10:50 h. de Gorliz - Armintza, junto a
otros seis lugareños entre los que estaban los amigos de
Óscar y Vicky (Chino, Leire, Asier e Itzi), que nos
tuvieron los dos días organizados a la perfección, con
una hospitalidad y simpatía que esperamos tener
oportunidad de devolvérselas pronto. El tiempo amenazaba
tormentas por todo el norte, pero nuestra excursión fue
dichosa ya que tuvimos un día perfecto para andar.
Pasamos tres horas disfrutando de la cornisa cantábrica
en un sube-y-baja hasta llegar al cabo Villano, donde
se ubica un gran cañón de la postguerra y desde donde
nos metimos por las galerías del búnker sobre el que se
asienta el faro de Gorliz.
Mientras veíamos a lo lejos algunos de los
montes emblemáticos del País Vasco (Oiz, Anboto, Gorbea,
Pagasarri...), llegaríamos a la cumbre del monte Ermua,
donde como buenos montañeros nos hicimos la foto de
grupo y depositamos en su buzón una de nuestras tarjetas
de cumbres, describiendo nuestro recorrido.
Llegaríamos al puerto pesquero de Armintza a
las 14:10 h, ya junto al grupo que iba con las cuatro
niñas que para evitar el barro habían subido
directamente al faro por el camino alfaltado que partía
de Gorliz.... Después de unos txakolis y la
comida fuimos a acomodarnos en las cabañas del Camping
de Sopelana, repartiéndonos en tres bungalows. Llegaría
Toño Bardasco y nos acompañaría toda la tarde haciendo
de cicerón y explicándonos interesantes sitios de
Bilbao. Después de unos paseos nocturnos por la playa
cenamos cada uno en nuestra cabaña, como si de tres
familias se tratara, aunque las visitas de un lado a
otro eran constantes. Alguno decidió salir por los bares
de copas de la zona, lo que no evitó que se levantara al
día siguiente sobre las 9:00 de la mañana, aunque
después del sabroso almuerzo con los membrillos y
mermeladas de Miguel Ángel se quedaran como lelos viendo
Mani Manitas en la tele.
El domingo se presentaba chungo después de
haber estado toda la noche lloviendo y el viento
azotando. Pero nada de eso: Pudimos disfrutar de una
buena vuelta por la playa para ir después otra vez a
Artmintza de donde partimos con Chino y Leire hacia la
isla de Gaztelugatxe, donde se encuentra la ermita de
San Juan. Quedándose los demás en la zona de recreo, el
Chino nos dio una hora para bajar a la isla a Jose B,
Javi y Pastelero, ya que el acceso es espectacular, un
camino que baja hasta la carretera hoy derrumbada y que
termina en el puente de piedra que lleva al islote,
donde hay que subir unos 230 escalones, con las
estaciones del Viacrucis. Según la tradición, una vez
alcanzada la ermita hay que tocar la campana tres veces
para pedir un deseo, normalmente casamiento. Así es que
alguno de nosotros probó suerte.... Conseguimos llegar
a tiempo donde estaban los demás, con una sudada
impresionante por las escaleras, cuestas, la prisa y la
humedad. Otra vez de enhorabuena porque no empezó a
llover hasta que llegamos.
La jornada se iba acabando, y claro, para
rematar este viaje, qué mejor que ir a comer a una
“cervecería”, que por allí se estila tanto. En esta
ocasión fuimos a Urizar, donde había mogollón de gente,
también con Itzi y Asier.
Hechas la tertulia y las oportunas cuentas
nos despedimos de nuestros fabulosos guías y emprendimos
el largo viaje para llegar a casa sobre las ocho de la
tarde. |
|